ARTÍCULO DE OPINIÓN DE LA OBRA “LOS RÍOS PROFUNDOS”

                                             

Bueno la  obra  “LOS RÍOS PROFUNDOS” es la tercera obra de José María Arguedas  titulada así, por sus viajes que hace por la zona andina del Perú y  alude a la  profundidad de los ríos andinos que nacen desde la cima de la cordillera de los andes y llega  a los pueblos.

EL VIEJO.- El relato comienza en que  el narrador Ernesto y su padre llegan a cuzco, su padre viajaba constantemente  buscando donde ejercer  su profesión. En cuzco llegan  a un pariente suyo  al que lo llamaban el viejo,  para solicitarle alojamiento y trabajo, pero resultó ser un  tipo avaro, tosco y  con fama de explotador, que  le  lleva a  una cocina, sucia y jeteado por el humo, para que puedan alojarse.

En ese momento el niño Ernesto recuerda sus pasados,  cuando dormía en una tina  con frazadas sucias, en la casa de su madrasta. Al día siguiente decide continuar el viaje pero antes, van darse un paseo por la plaza de armas de la ciudad.

Ernesto se asombra al ver los grandes muros incaicos que eran bien tallados y encajados perfectamente  que le parecían  moverse y hablar, luego pasan por la catedral, y rezan frente a la imagen el “señor de los temblores” ahí  se encuentran con  el viejo acompañado con su servidor pongo. Ernesto no puede contener el desagrado que le produce el viejo y lo saludada.

 EL VIAJE.- En este capítulo  narra  los  viajes de su padre como abogado  por diversos pueblos de la zona andina. Cuenta anécdotas  curiosas que les  tocó vivir  en  algunos pueblos, en otro pueblo las personas les miraban con rabia, a excepción de una joven alta de ojos azules  que parecía más amigable.  Ernesto se venga  cantando huayno en las esquinas. De ahí pasan a cangallo y siguen hacia a huamanga por la pampa de moruchos que no era más que nada jinetes  que se tenían la costumbre de hacer competencia de caballos, en el pueblo.

LA DESPEDIDA.- Cuenta que su padre  le promete que sus viajes acabarían en “Abancay”, ya que allí vivía un notario, un viejo amigo suyo. Que sin duda les recomendaría  a muchos clientes. Pero sin embargo  resulto ser un tipo enfermo, y para colmo  con una mujer e hijos pequeños.  Entonces decide alojarse en una posada en ella pone el letrero de abogado, pero los clientes no llegan van. Por la decide iniciar  si viaje pero esta vez sin Ernesto  porque ya estaba matriculado de interno en un colegio religioso  de la ciudad, cuyo director era el padre linares. Y pues su padre ya  apresurado con emprender su viaje,  y llega un tal Joaquín, un hacendado de chalhuanca  a solicitarle su servicio  de profesión. Ernesto entonces se despide  de su padre muy triste y se queda en internado.